La alférez Ashley Vargas, desaparecida el pasado 20 de mayo durante un vuelo de instrucción en Pisco (Ica), fue hallado este jueves luego de 16 días de intensas operaciones de rastreo, confirmó el diario Perú21, que cita fuentes oficiales. Los restos fueron localizados dentro de la cabina del avión KT-1P, aún sujeta al asiento con el cinturón de seguridad. La nave se encontraba sumergida frente a la playa Mendieta, en la Reserva Nacional de Paracas.
Gracias a un robot operado desde el buque oceanográfico BAP Carrasco de la Marina de Guerra el hallazgo fue posible, que previamente ya había ubicado gran parte del fuselaje del avión siniestrado. Según el mismo medio, la corriente marina habría desplazado la aeronave desde las inmediaciones de la Isla Zárate —lugar de la última comunicación de Vargas— hasta quedar atrapada entre la vegetación submarina. La Marina actúa con sumo cuidado para preservar la integridad de los restos y lograr su recuperación.
“Es una tranquilidad, sobre todo para el padre. Vamos a esperar la comunicación oficial”, declaró el abogado José Ocampo, quien defiende legalmente a los padres de la alférez. Retiró que, de momento, no han mantenido comunicación de la FAP.El letrado ha señalado previamente que Vargas podría haber quedado atrapada dentro de la aeronave debido a una falla en el asiento de eyección, por lo cual la familia evalúa presentar una denuncia penal contra la FAP por el presunto delito de homicidio simple.
En la víspera, el ministro de Defensa, Walter Astudillo, informó que las Fuerzas Armadas ya habían determinado la zona exacta donde impactó el avión. “Estamos en la fase final y esperamos noticias en los próximos minutos”, manifestó.