Una llamada que se prolongó por más de dos horas. El presidente estadounidense y su homólogo ruso, buscó que Moscú acepte el cese del fuego acordado con Zelensky, mientras que el Kremlin no quiere que Kiev siga recibiendo armas de Occidente. Donald Trump y Vladimir Putin conversaron por teléfono durante unos 90 minutos. Moscú condiciona una tregua más amplia al cese del rearme ucraniano y del apoyo militar occidental.
Como parte de una iniciativa encabezada por Estados Unidos para poner fin a la invasión rusa a Ucrania, Rusia aceptó un alto el fuego limitado en sectores energéticos e infraestructurales de Ucrania, según confirmó este martes la Casa Blanca. Sin embargo, el Kremlin ha presentado una serie de condiciones y demandas adicionales para avanzar en un acuerdo más amplio.
El Kremlin, en su propia versión de la conversación, destacó que Rusia ha expuesto una serie de condiciones que considera fundamentales para la viabilidad del acuerdo. Entre ellos, exigió la implementación de mecanismos de control efectivos sobre cualquier alto el fuego en la línea de conflicto, el fin de la movilización de ciudadanos ucranianos y el cese del rearme de sus fuerzas armadas. También solicitó abordar lo que calificó como las “causas fundamentales de la crisis” y demandó la suspensión total del apoyo militar extranjero a Ucrania, incluyendo el cese del suministro de armas y asistencia en inteligencia.
Durante el dialogo que sostuvieron ambos lideres, Putin también informó a Trump sobre un acuerdo para un intercambio de 175 prisioneros de guerra de cada bando entre Rusia y Ucrania, además de la liberación de 23 soldados ucranianos gravemente heridos como un “gesto de buena voluntad”. No se han proporcionado detalles sobre los términos específicos del alto el fuego ni sobre el papel de Ucrania en las negociaciones. El presidente Donald Trump y el presidente ruso Vladimir Putin concretaron este martes su esperada llamada telefónica para tratar de avanzar en una tregua definitiva en Ucrania.